Explorar Roma es como pelar una cebolla; siempre hay más capas por descubrir. Mientras que la Fontana di Trevi y la Piazza Navona están en el radar de todos los viajeros, hay una miríada de fuentes menos conocidas que son igualmente encantadoras. Estas joyas escondidas no solo ofrecen una experiencia más tranquila e íntima, sino que también cuentan sus propias historias únicas. Ponte tus zapatos para caminar y sumerjámonos en algunas de las fuentes más pasadas por alto pero hipnotizantes de Roma.
Fontana delle Tartarughe: La Fuente de las Tortugas
Escondida en la tranquila Piazza Mattei, la Fontana delle Tartarughe es una agradable sorpresa para quienes la encuentran. Esta encantadora fuente, que data de finales del siglo XVI, presenta delicadas tortugas de bronce trepando por delfines de mármol. Es una pieza caprichosa que le da a la plaza un aire de magia y serenidad.
Para llegar allí, puedes caminar fácilmente desde el Barrio Judío o Campo de’ Fiori. Es un paseo rápido de 10 minutos desde el bullicioso corazón de Roma, pero se siente como un mundo aparte. Una vez allí, encontrarás un lugar tranquilo para sentarte y quizás disfrutar de un gelato mientras admiras a las juguetonas tortugas. El área circundante también está rica en historia, así que asegúrate de deambular por las calles vecinas para apreciar completamente este rincón oculto de Roma.
Fontana dell’Acqua Paola: La Gran Fuente
También conocida como Il Fontanone, la Fontana dell’Acqua Paola es una estructura grandiosa que ofrece impresionantes vistas de la ciudad. Ubicada en la colina del Gianicolo, esta fuente fue encargada por el Papa Pablo V a principios del siglo XVII y está construida con mármol tomado de las ruinas del Foro Romano. El impresionante tamaño y el estilo barroco de la fuente la convierten en una visita obligada para cualquiera que explore Roma.
Para llegar a la Fontana dell’Acqua Paola, puedes tomar un autobús desde Trastevere o simplemente disfrutar de una caminata tranquila hasta la colina del Gianicolo. La subida definitivamente vale la pena, no solo por la fuente en sí, sino también por las vistas panorámicas de Roma que te esperan en la cima. Una vez que hayas absorbido el paisaje, considera visitar la cercana iglesia de San Pietro in Montorio, que alberga un pequeño templo diseñado por Bramante.
Fontana dei Quattro Fiumi: La Fuente de los Cuatro Ríos
Ubicada en la Piazza Navona, la Fontana dei Quattro Fiumi a menudo se ve opacada por las fuentes más famosas de la plaza. Sin embargo, su diseño intrincado y su significado histórico la convierten en una joya escondida que vale la pena explorar. Diseñada por Gian Lorenzo Bernini a mediados del siglo XVII, esta fuente representa los cuatro ríos principales de los continentes conocidos en ese momento: el Nilo, el Danubio, el Ganges y el Río de la Plata.
Puedes llegar fácilmente a la Piazza Navona a pie desde muchos de los puntos de referencia centrales de Roma. Está a unos 15 minutos a pie del Panteón o Campo de’ Fiori. Si bien la plaza en sí puede llenarse de gente, la Fontana dei Quattro Fiumi a menudo recibe menos atención, lo que te permite apreciar su belleza y artesanía de cerca. Tómate tu tiempo para estudiar las detalladas esculturas y considera la rica historia que rodea a esta obra maestra.
Fontana della Barcaccia: La Fuente del Barco Hundido
Situada en la base de la Plaza de España, la Fontana della Barcaccia es un tesoro a menudo pasado por alto. Diseñada por Pietro Bernini, padre del renombrado Gian Lorenzo Bernini, esta fuente representa un barco hundiéndose que toma agua. Se dice que el diseño está inspirado en un barco que apareció en la plaza durante una inundación histórica del río Tíber.
Para visitar la Fontana della Barcaccia, simplemente dirígete a la Plaza de España, que es accesible en metro (Línea A, parada Spagna) o con un corto paseo desde la Fontana di Trevi. La fuente proporciona un lugar sereno para relajarse y disfrutar de la atmósfera de una de las plazas más famosas de Roma. La Plaza de España en sí es un destino turístico popular, pero la fuente ofrece una experiencia más tranquila y reflexiva.
Fontana di Piazza Colonna
Situada en la bulliciosa Piazza Colonna, esta fuente a menudo es pasada por alto por los visitantes que se dirigen al cercano Panteón o la Fontana di Trevi. Encargada por el Papa Gregorio XIII a finales del siglo XVI, la Fontana di Piazza Colonna presenta un obelisco central rodeado por una cuenca circular. La simplicidad de su diseño contrasta bellamente con la grandeza de la arquitectura circundante.
Para llegar allí, puedes dar un corto paseo desde el Panteón o la Fontana di Trevi. La Piazza Colonna también es un gran lugar para observar a la gente, ya que es un centro neurálgico tanto para locales como para turistas. Después de admirar la fuente, considera explorar la cercana Galleria Alberto Sordi para algunas compras o una pausa para el café.
Fontana delle Naiadi: La Fuente de las Náyades
Ubicada en la Piazza della Repubblica, la Fontana delle Naiadi es un impresionante ejemplo de escultura de finales del siglo XIX. La fuente presenta estatuas de bronce de náyades, ninfas de agua de la mitología griega, cada una representando un tipo diferente de agua: lagos, ríos, océanos y agua subterránea. Las poses dinámicas de las figuras y el intrincado detalle hacen de esta fuente un festín visual.
Para visitar la Fontana delle Naiadi, puedes tomar el metro hasta la parada Repubblica (Línea A) o caminar desde la Estación Termini. La fuente está situada en una plaza concurrida, pero ofrece un lugar tranquilo para sentarse y admirar el arte. Cerca de allí, encontrarás la Basílica de Santa María de los Ángeles y los Mártires, diseñada por Miguel Ángel, que también vale la pena visitar.
Fontana del Tritone: La Fuente del Tritón
Diseñada por Gian Lorenzo Bernini, la Fontana del Tritone se encuentra en la Piazza Barberini. Esta obra maestra barroca presenta al dios del mar Tritón soplando una caracola, rodeado por cuatro delfines. La fuente fue encargada por el Papa Urbano VIII a principios del siglo XVII y es un testimonio del genio de Bernini.
Para llegar a la Fontana del Tritone, puedes tomar el metro hasta la estación Barberini (Línea A) o caminar desde la Fontana di Trevi. La fuente está situada en una plaza concurrida, pero ofrece un lugar sereno para sentarse y apreciar el trabajo de Bernini. Después de visitar la fuente, considera explorar el cercano Palazzo Barberini, que alberga la Galería Nacional de Arte Antiguo.
Fontana delle Rane: La Fuente de las Ranas
Ubicada en el encantador vecindario de Coppedè, la Fontana delle Rane es una fuente caprichosa que presenta ranas que arrojan agua en la cuenca. Diseñada por Gino Coppedè a principios del siglo XX, esta fuente es un ejemplo encantador del estilo único del arquitecto, que mezcla el Art Nouveau con elementos de fantasía y surrealismo.
Para visitar la Fontana delle Rane, puedes tomar un tranvía o autobús hasta la Piazza Buenos Aires y luego caminar una corta distancia hasta la fuente. El vecindario de Coppedè es una joya escondida en sí misma, con su arquitectura ecléctica y calles tranquilas. Después de admirar la fuente, tómate un tiempo para explorar el área circundante y empaparte de la atmósfera única.
Roma es una ciudad que nunca deja de asombrar, y sus fuentes menos conocidas son un testimonio de su rica historia y patrimonio artístico. Ya seas un visitante por primera vez o un viajero experimentado, estas joyas escondidas ofrecen una visión más tranquila e íntima de la belleza de la Ciudad Eterna. Para más consejos sobre cómo explorar las fuentes de Roma, consulta consejos de viaje a pie por Italia.